En las relaciones nos ocurre lo mismo que en la vida. Del mismo modo que no sabemos vivir en presente (siempre estamos preocupados por el futuro, o atascados en el pasado), tampoco sabemos valorar en presente. Es por ello que generalmente pensamos que lo que hemos tenido, o lo que podríamos conseguir siempre fue, o podrá ser, mejor a lo actual, y no sabemos apreciarlo. Los seres humanos somos así, es nuestra inclinación natural... no sabemos vivir, amar, y valorar en presente. Apenas algunos evolucionados logran esa perspectiva tan elevada y logran estar plenos con lo que tienen y son. Pero, el resto, la gran mayoría, viven la vida sintiendo que están incompletos y que siempre algo les falta para la felicidad verdadera.
Y como no sabemos vivir en presente, es por eso que, uno no suele saber cuánto ama, sino hasta que siente el vacío, y ese presente se torna pasado, y uno comienza a añorar nuevamente tener lo que perdió.
El desafío no consiste solamente en valorar lo que tenemos. El desafío consiste en vivir lo que tenemos, sin estar en otro tiempo que no sea el aquí y el ahora". Daiana Slipak
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